Un corazón de recuerdo

Hace poco fui de boda.

De recuerdo del enlace, a las chicas nos dieron un corazón con rosas dentro.

Todavía no sé bien bien para que sirve (alguien me chivó que eran pétalos olorosos para la bañera), pero bonito es muy bonito.

Cocinando

Soy muy mala cocinera...

Un cepìllo agotado

He agotado a mi pobre cepillo de dientes. Tiempo de cambiarlo.

Patisserie Valerie

Me vuelvo a quedar sin fotos actuales y tengo que volver a echar mano de mi archivo.

Esta vez, voy a colgar alguna de las fotos que tomé en la Patisserie Valerie de Londres. Uno de mis amigos es un goloso y pasamos por allí un par de veces durante nuestro corto viaje.

Eligiendo.

Me encanta fotografiar comida.

Me gustó hasta el logo del local.

Frutero, frutas y enchufe

Un bodegón en mi cocina.

Desde mi balcón

Salí al balcón a tomar el aire y me hizo gracia esta imagen. Curiosidades del día a día.

Reflejos y limones

Componiendo el bodegón con los limones, también hice algunas fotos de sus reflejos en el plato.

Las fotografías están algo quemadas, pero busqué ese efecto aprovechando que hacía muchísimo sol.

Tres limones

Me regalaron tres limones.

Y me vino la inspiración.

Quería fotografiar una naturaleza muerta, un bodegón.

Y esto fue lo que me salió.

Me basé en una foto de Eliot Elisofon que aparece en mi libro de fotógrafos de la revista LIFE.

Santa Quitèria

No pude encuadrar bien la foto porque el sol me daba en la pantalla de la cámara y los ojos y no veía gran cosa.

Una mirada penetrante

El otro día fui a cenar a L'Hospitalet de Llobregat, mi ciudad natal, que está pegada a Barcelona.

Camino del restaurante me encontré con estos ojos, que captaron toda mi atención (lástima que no hubiese más luz).

Más munición

Ya me he comprado el resto de hilos necesarios para acabar mi cañamazo de flores.

Menú de boda

Hoy he ido de boda.

Y he comido muy bien.

De primero, esqueixada con bacalao.

De segundo, cordero.

De postre, tarta helada con chocolate fundido.

Niebla en Barcelona

La niebla ha estado presente en Barcelona durante toda la semana. Al ir hacia mi trabajo, pasé junto al Hotel Arts, en el Port Olímpic, y aproveché que llevaba mi camarilla conmigo para hacerle esta tenebrosa foto.

Trío imprimado

Ya tengo imprimadas las miniaturas que me regalaron.

Ahora me toca esperar que se seque esta primera capa de pintura blanca y ya podré empezar a pintarlas de verdad.

Mi favorita.

Ahora he de pensar en los colores que utilizaré. ¿Vestidos en rojo? ¿Rubios? ¿Armas de hierro o de cobre?...

Cambio de plancha

Viejo y nuevo.

¿Tengo demasiados collares?

Co co co co co

I love Vespa

La luz, el entorno, era el momento perfecto de hacerle un par de fotos a mi Vespa.

Dos violines, una viola y un violonchelo

Ayer fui a un concierto de música de cámara en la Sala 2 de L'Auditori, en Barcelona.. El Cuarteto de Leipzig, formado por dos violines, una viola y un violonchelo, tocó varios temas de música contemporánea.

No entiendo esta clase de música, pero la verdad es que disfruté bastante el concierto, incluidos sus gritos y silencios.

He comido demasiado

Aviso de que las fotos no concuerdan con lo que estoy explicando. Pero igual, ha sido una gran comida.

Hoy he ido a comer a La Marina de L'Hospitalet, una masía que está en la Zona Franca. Por primera vez este año, y última, ya que se está acabando la temporada, he comido calçots (aunque no les he hecho fotos) y he probado los caracoles (tampoco les he hecho fotos). Ahora estoy deseando volver para volver a comer cargols.

Ha sido una comida típica catalana en una masía de lo más pintoresca.

De segundo he comido albóndigas caseras, buenísimas.

Cuando la comida está tan buena, se come demasiado... pero un día es un día.

Casas con color